SANTO DOMINGO, R. D.- La creación en América Latina y el Caribe de
unos 18 ministerios de Telecomunicaciones y Tecnología de la Información y la
Comunicación (TIC) han fomentado el diseño e implementación de planes,
programas, acciones, políticas y proyectos que impactan a sectores de
incidencia en el progreso de los países de la región.
La valoración fue hecha por observadores que estiman prioritario
la creación de un Ministerio de Telecomunicaciones y TIC en el país.
La iniciativa de los países de la región han logrado superar
esquemas que limitaban a prácticas regulatorias el uso de las
Telecomunicaciones y las TIC, como ha ocurrido en la República Dominicana
donde, solo ahora cuando la tecnología digital crece a ritmo exponencial a
nivel mundial, el Gobierno trabaja en la implementación del proyecto “República
Digital”, indicaron.
Advirtieron que la propuesta de República Digital del Presidente
Danilo Medina correría el riesgo de dispersarse en la realización de programas
y proyectos de diversas instituciones, como serían el Ministerio de Educación,
por un lado, el Instituto Dominicano de las Telecomunicaciones (Indotel), y la
Oficina Presidencial para la Tecnología de la Informacion y la Comunicación
(OPTIC), por el otro, entre otras.
Dijeron que, por tanto, la realidad impone la creación de un
órgano rector, un Ministerio de las Telecomunicaciones y TIC que sea el
encargado de ejecutar la trascendente iniciativa, como lo hizo Corea del Sur,
convirtiéndose en pocos tiempos en una potencia tecnológica en Asia y en el
mundo.
La implementación de Ministerios de Telecomunicaciones y TIC
permiten implementar desde un eje central, estrategias que impulsan
programas, proyectos, iniciativas y acciones que causan un mayor nivel
desarrollo y avance en áreas de la educación, la salud, la agricultura,
economía, la justicia y la seguridad, por tan solo citar algunos ejemplos,
según precisaron.
Actualmente tienen ministerios de Telecomunicaciones, Colombia,
Chile, Ecuador, Costa Rica, Paraguay, Nicaragua, México y Cuba, países en los
cuales se ha logrado superar con éxito el croquis de los Institutos
regulatorios al estilo Instituto Dominicano de las Telecomunicaciones
(Indotel). Dieron paso a Ministerios más abarcadores y más acorde con el
desarrollo de las TIC en el mundo.
También, tienen Ministerios o viceministerios para gestionar las
TIC Argentina, Belice, Bolivia, Brasil, El Salvador, Guatemala, Haití,
Honduras, Jamaica, Perú, Suriname, Uruguay y Venezuela.
Indicaron los observadores que, pese a los encomiables avances que
registra el país, los logros en este campo sufren limitaciones que son
generadas, en otras causas, por el esquema netamente regulatorio trazado
correcta y estratégicamente en su momento, por las normas que han regido al
sector a raíz de la ley 153-98 que regula las telecomunicaciones.
Además del Indotel, el Estado incide en el sector a través de la
Oficina Presidencial de Tecnología de la Informacion y la Comunicación (OPTIC)
y la Comisión Nacional para la Sociedad de la Información y el Conocimiento
(CNSIC), así como otras instituciones que en esencia no tienen la facultad ni
pueden producir e implementar políticas de Estado, limitándose a discutirlas y
plantearlas, muchas veces sin poder de realización por falta recursos y de un
marco político estratégico global.
Significaron que la realidad actual plantea otra cosa, la
necesidad de dar un salto hacia adelante, con la creación de un organismo
que asuma el manejo macro, que sobrepase los planteamientos regulatorios y
pueda plantear estrategias y que ejecute políticas de Estado en materia de TIC
que puedan ser desplegadas en diversas áreas y en un espectro más amplio.
En tal sentido, consideraron el planteamiento de un Ministerio
como acertado,-porque aunque no sería una novedad en la región, aunque sí lo en
el país- éste podrá ocuparse como nuevo organismo, como órgano rector, además
de la parte regulatoria, de la formulación de estrategias, plantear y ejecutar
la política TIC en República Dominicana, como ha sido la práctica en muchas
naciones del mundo.
Estimaron que el Ministerio de Telecomunicaciones se encargaría,
entre otras funciones, por ejemplo, de “coordinar con los actores involucrados,
el avance de los ejes verticales y transversales de las TIC, y el plan nacional
correspondiente, brindando apoyo y asesoría a nivel territorial”.
Resulta, según su balance, que las experiencias de creación de
Ministerios en otros países arrojan mucha luz en este aspecto. Veamos:
1.- Colombia
Creó su Ministerio de Telecomunicaciones y de la Sociedad de la
Información en el año 2009, lo que le ha permitido registrar un impacto
ostensible en su desarrollo hacia la sociedad digital sin descuidar el control
y regulación de su espectro radioléctrico. A través de ese Ministerio Colombia
puso en marcha -el Programa Vive Digital que espera conectar el 100 por ciento
de hogares y pequeñas y medianas empresas al 2018.
Además:
-Los municipios conectados a Internet de alta velocidad pasaron de
200 a 1078 durante el período 2010-2014.
-La conexión de los hogares colombianos subió del 17 al 50 por
ciento, principalmente en sectores de bajos recursos y zonas apartadas de
la nación sudamericana.
-La conexión de pequeñas y medianas empresas pasó del 7 al 61 por ciento
en el señalado lapso.
-En más de siete mil poblaciones rurales que superan los 100
habitantes se instalaron centros de acceso comunitario, que llaman Kioscos Vive
Digital, para capacitar a la comunidad.
-Un programa de entrega masiva de computadores, más de dos
millones de equipos en colegios o escuelas, logrando un computador por cada
once estudiantes, con miras a impactar la calidad de la educación.
-Destina $53 mil millones para la capacitación de jóvenes.
Colombia se ha propuesto a través de su Ministerio, formar 90,000 profesionales
TIC en los próximos años.
2.-Ecuador:
La República de Ecuador creó su Ministerio de Telecomunicaciones y
de la Sociedad de la Información (MINTEL) apenas el 13 de agosto del 2009, bajo
el mandato presidencial del economista Rafael Correa Delgado, con miras a
realizar acciones que garanticen el acceso igualitario a los servicios TIC para
asegurar el avance hacia la Sociedad de la Información y así el buen vivir de
la población ecuatoriana.
En diciembre de 2015 comenzó a regir además la Ley Orgánica de
Telecomunicaciones que crea la Agencia de Regulación y Control de las
Telecomunicaciones (ARCOTEL).
El MINTEL ha abordado una serie de programas y proyectos dirigidos
a lograr la masificación de uso de Internet en Ecuador, lo que conllevó a:
-Realizar una fuerte inversión que permitió duplicar el uso de
Internet en menos de una década y lograr al 2016 que más del 50% de la
población acceda y use las TIC.
-El Plan TIC impulsa el desarrollo de una industria tecnológica a
través del uso masivo de Internet y el aprovechamiento de estas herramientas en
las PYMES, contribuyendo al cambio de vida de los ciudadanos y de la economía
del país.
-Se trabaja en el manejo de la seguridad digital debido a la
necesidad de asegurar servicios para lograr mayor impacto en los negocios, en
el Estado y en el ciudadano.
-Garantiza la debida seguridad en el marco de la Sociedad de la
Información, asumiendo la responsabilidad de educar a los ciudadanos para que
no sean víctimas de los fraudes informáticos.
-Instala los denominados Infocentros Comunitarios en las zonas
rurales y urbanas marginales, contribuyendo con la erradicación del
analfabetismo digital y facilitar el desarrollo personal a través del uso de
las TIC.
Destacan los analistas que igualmente se están estimulando
desarrollo TIC a través de Ministerios países como Chile, México, Costa Rica,
Paraguay, Nicaragua y la República Socialista de Cuba. Otras naciones de la
región, al igual que la República Dominicana, tienen en cierne la idea de crear
sus propios Ministerios TIC para participar con más ahínco y decisión en la
Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), una formidable asociación
público-privada que aglutina en la actualidad 193 países miembros y más de 700
entidades del sector privado e instituciones académicas.
México se pone las pilas
En México, la Secretaría de Telecomunicaciones, el equivalente del
Ministerio TIC, realiza una serie de transformaciones que han logrado impactar
en estructuras superadas que se resistían a ceder a los avances de sociedad
digital.
El país azteca está ha revolucionado su marco regulatorio,
ha abierto el mercado TIC y ha logrado atraer importantes inversiones en áreas
como la televisión, la telefonía y la comunicación digital.
Además, México implementa estrategias que:
-Están transformando la educación mexicana
-Enfoca su educación desde una perspectiva de mercado
-Utiliza la educación para contribuir al crecimiento económico y
la innovación tecnológica para generar crecimiento económico sostenido.
En ese sentido, México lo que ha hecho es acelerar la inclusión de
sus ciudadanos a la sociedad del conocimiento mediante la creación de una
estructura ágil con visión moderna de los avances que registra la era digital.
Chile avanzó adelante
Chile dio este paso en los años 90s, siendo uno de los países
latinoamericanos que digitalizó completamente su infraestructura de
telecomunicaciones y registró avances significativos en la
informatización de empresas y hogares, sextuplicando el número de computadoras
per cápita entre 1990 y 1998.
Los resultados de esas políticas de los diferentes gobiernos
chilenos han sido notorios, especialmente en las experiencias de gobierno
electrónico, compras públicas, la administración tributaria y el registro civil
y de identificación del ciudadano.
Los observadores destacaron que el afán de avanzar no cesa en
Chile, el actual gobierno creó el Comité de Ministros para el Desarrollo
Digital, o sea, que sus iniciativas para lograr insertarse en la sociedad
digital ha desbordado el Ministerio para asumirlo con un conglomerado de estas
dependencias, lo que enfatiza la importancia que los chilenos dan al tema.
Sostuvieron que el Ministerio TIC serviría además, como ha
ocurrido con los chilenos, para apropiarse y masificar las tecnologías
como instrumentos que facilitan el bienestar y el desarrollo personal y social,
pero que igualmente contribuye a mejorar la competitividad del país.
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