Malecón o circunvalación libre

Por Ángel González Feliz

Niños montando bicicletas, volando chichiguas, jugando “El topao”; jóvenes jugando baloncesto o vitilla; madres paseando en coches sus bebés; adolescentes corriendo en patines. Al leer eso podrían pensar en una utopía, pero pensándolo un poco con detenimiento no es algo tan lejano. Justo ese tipo de actividades se hacían cuando los domingos teníamos el “Malecón Libre” en Santo Domingo. Es una actividad que consiste en desviar el tránsito permitiendo así que las personas puedan hacer un uso entretenido y divertido de esta área tan hermosa frente al mar. Lo que se busca es el esparcimiento sano y el disfrute de todos los que se animen a ir.

A raíz de la reciente inauguración de la bella circunvalación que va desde el CURSO-UASD hasta el boulevard María Montés nos nace la idea de lo útil que sería toda esa calle para hacer una actividad como la arriba descrita. “Malecón o circunvalación libre”, disponer de un domingo en el que niños, jóvenes, adultos y mayorcitos puedan ir a disfrutar de la buena vista que se aprecia y del fresco viento proveniente desde el mar que adorna nuestra costa. Ya como que no parece tan lejos la idea. Todo es un asunto de disposición por parte de las autoridades competentes y de que el pueblo acoja la propuesta. 

Barahona necesita lugares y actividades de esparcimiento, pero más que eso, necesita que todos los aprovechemos. Un domingo en la circunvalación donde no tengamos que preocuparnos si el polvo que levantan los camiones, si los vehículos pesados o por lo rápido que van los motores, no, un día donde la única preocupación sea un raspón en alguna rodilla de cualquier infante. Un día para disfrutar con un sano juego de dominó mientras hacemos historias y chistes debajo de la sombra de un árbol.

Y digo domingo por poner un día, pero de hecho no importa que sea lunes, martes o viernes, siempre que sea disfrutado por todos.

Podría iniciar como una actividad de un día y quién sabe si acaba como una tradición de todos los barahoneros. Un día para pasarlo en familia, descansando, leyendo, escuchando buena música y para olvidar las preocupaciones del diario vivir por al menos un rato, contando con la protección de agentes de seguridad ya sea Policía, AMET o cualquier otra entidad. Culminando con la proyección de una película, con alguna sana competencia, un karaoke, etc. Las posibilidades son muchas, solo basta que unidos hagamos de este sueño una realidad. El cambio está dentro de nosotros mismos, no esperes para actuar.