Por Juan Pérez.
Durante muchos años la sociedad dominicana ha esperado con fervor la
elaboración de la Ley de Partidos
Políticos al parecer estamos más cerca que nunca de esta realidad, ya que el
sistema político dominicano ha descansado durante 20 años en la Ley 275-97,
actual marco jurídico en materia Electoral.
Haremos referencias a los puntos claves que hasta al momento han
enfrentado internamente al Partido de gobierno y Partidos de la oposición en
función de sus intereses partidarios y personales.
Ante tal circunstancias consideramos que debe haber puntos de
coincidencias en los diversos partidos, para que los electores recibamos con
satisfacción tan deseada pieza
legislativa por tanto, establecemos el presente criterio.
Debe establecerse un tope en las contribuciones económicas privadas y la
publicación de nombres de los donantes, lo cual contribuyen a la transparencia
de gestión administrativa de los partidos, de tal manera se evita el lavado de
activos, narcofinanciamiento, adjudicación de obras públicas y exenciones de
impuestos.
Las primarias deben ser celebradas en fechas individuales situación que
permitiría la garantía de orden, reducción del caos y la anarquíadentro de la
militancia de los partidos políticos.
Las primarias deben ser cerradas para evitar transfuguismo de la
militancia política, además de garantizar la elección de personas decorosas del
partido y de la comunidad.
Todos los partido deben crear con sus propios padrones justamente para
los procesos de primarias, donde sólo puedan ejercer ese derecho los miembros
inscrito en el partido, la celebración de primarias con el padrón de la Junta
Central Electoral permite que todas las personas que allí figuren podrán votar en
función de sus derechos ciudadanos.
La posición de eliminar el voto preferencial, es porque realmente no
existe tal preferencia en vista que el sistema coarta, restringe y cercena la
auténtica preferencia del electorado, cuando tenemos que elegir un candidato
que no es de nuestra preferencia electoral.
Los electores no tenemos opción ejercer la preferencia del voto, en
vista que al votar por el Diputado estoy eligiendo al Senador, al elegir al
Alcalde se elige al Regidor, en este sistema no existe el voto preferencial.
Esta forma de escogencia limita la preferencia de votar por un Senador, Diputado,
Alcalde o Regidor de la preferencia del electorado de varios partidos, portal
razón el sistema de partido no es democrático por lo cual obliga al electorado
a elegir un candidato que no es de nuestra preferencia.
Por tanto, lo más racional sería que las candidaturas fuesen
individuales (Sin Arrastre), de tal manera que todos los candidatos estén en la
obligación de salir por calles y callejones a buscar ellos mismo sus votos.
La verdadera democracia se construye con la participación de los
principales actores de la sociedad, por lo cual estamos llamados a actuar con
transparencia ante la situación que nos encontramos.
La sociedad dominicana espera de los actores la creación de una ley de
Partidos políticos que pueda abrir las puertas de la democracia y la
transparencia en cada proceso electoral en la República Dominicana.
El autor Juan Pérez es politólogo.
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