Por Miguel Espaillat Grullón
1 - Para alguien que le dé seguimiento al acontecer político dominicano,
y naturalmente, que vea más allá de la curva, le es fácil deducir, que la
persecución contra el agrónomo Leonardo Faña es una venganza pendiente de la
mafia agropecuaria que él denunció y desenmascaró en los tiempos del danilato.
2 - Como se recordará, Faña la había emprendido contra el zar de la
importación de ajo y otros rubros agropecuarios, cuyo negocio y posterior
comercialización, especulando, constituía una mordida multimillonaria.
Por igual, Faña, con un valor poco común, desenmascaró el engaño que
constituían las visitas sorpresas. Ambas acciones eran un atrevimiento y
un desafío que los mafiosos no perdonarían jamás. La venganza era solo cuestión
de tiempo.
3 - El enojo de esa mafia que Faña enfrentó, y el deseo y la prisa por
venganza eran tan grandes, que esa fue la primera embestida que acometieron
contra ese funcionario del gobierno que encabeza Luis Abinader, que dicho sea
de paso, de primera se opuso a la designación de Faña como ministro de
agricultura. Con la persecución a este profesional agropecuario, sus
autores persiguen dos cosas: primero, vengarse de Faña haciéndole el mayor daño
posible, tal como se lo han hecho, y segundo, sembrar el caos, la discordia y
el disgusto en el gobierno perremeista.
4 - La influencia de la mafia que encabeza el zar del ajo y persecutor
de Faña es tan marcada, que el sustituto, hasta ahora director interino del
IAD, es un hombre del círculo íntimo de José Ramón Peralta. ¡Y oh cosas
de la vida!, ahora el director de recursos humanos del IAD, es Gerardo Mercedes
Torres, una persona de los más allegados a ese señor que anda detrás de la
cabeza de Leonardo Faña. Esto es todo una burla y un atropello
inaceptable, que no sabemos, porque nuestro presidente permite semejante
humillación contra la gente que lo llevó al poder, a costa de poner en peligro
la propia vida, y los bienes.
5 - Ahora bien, en días que preceden, se han dado varios acontecimientos
que tienen en shock a la ciudadanía. El país, estupefacto, se ha dado cuenta
que todas nuestras instituciones han sido secuestradas por diferentes mafias,
cuyo único fin es depredar inmisericordemente las arcas del estado. Las
Fuerzas Armadas y la Policía Nacional están controladas por mafias. Lo mismo
sucede en el estamento judicial, en Salud Pública, en el sector agropecuario y
empresarial, en todos los ministerios e instituciones autónomas y en todo
departamento y dirección gubernamental. La Marina, la aviación, Interior
y Policía, los cuarteles, las cárceles, educación, los funcionarios palaciegos
anteriores, la dirección de migración, pasaporte, Rentas Internas, aduanas,
turismo, Industria y Comercio, Obras Pública, las aseguradoras, los puertos y
aeropuertos, INAPA, el INDRHI, IDECOOP, INESPRE, Las EDES, BIENES
NACIONACIONALES, los comedores económicos, la prensa, las cooperativas de
maestros, cualquier dirección regional, la Junta Central Electoral, la CÁMARA
DE CUENTAS, la Suprema Corte de Justicia, el TRIBUNAL DE TIERRAS, y cualquier
otro Tribunal de la República, el sector bancario, la minería, el CONGRESO DE
LA REPÚBLLICA, los ayuntamientos, y hasta la administración de un cementerio y
de un mercado, están controlados por mafias dirigidas por siniestros capos.
¡Señores, en nuestro país, hasta las iglesias, están controlados por mafias con
mentalidad del medioevo!
6 - En este escenario, sucede, que en el gobierno de Luis Abinader, por
las acciones del Ministerio Público Independiente, estas mafias se están viendo
amenazada su existencia y la impunidad con que operan; y temerosos de la
derrota y de que los envíen a la cárcel y le quiten todo lo robado, por ello,
estos macabros personajes han iniciado una contraofensiva para amedrentar al
gobierno y al pueblo.
7 - En este tenor, las reuniones celebradas por oficiales activos y
jubilados en una casa del Residencial Alameda, en la que hubo arengas de
contenido desestabilizador y conspirativo contra el Gobierno constituido
legalmente, los sabotajes y vandalismos a estructuras sensibles del aparato
productivo nacional, el aumento desorbitado de los artículos de primera
necesidad, el corte de los cables que suplen de luz de la pista de aterrizaje
del aeropuerto “José Francisco Peña Gómez”, el vandalismo al teleférico Isabel de
Torres en Puerto Plata, y el daño causado a los equipos a la Corporación
de Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD) de manera
simultánea, y otros actos de esa naturaleza que vendrán, no son fortuitos, son
parte de las estrategias de las mafias referidas que con estas diabluras
intentan derrocar al gobierno legalmente constituido.
8 - Esa intentona le ha fallado y le seguirá fallando, porque ellos no
han comprendido que estos tiempos son otros, que no hay mal que dure
eternamente, y que los pueblos aguantan hasta un día. También han
omitido, que la comunidad internacional, (que también se está reinventando), no
tolerará una interrupción abrupta de la democracia por mafias asociadas
principalmente al narcotráfico y al lavado de dinero.
9 – En este punto queda claro, que los sabotajes aludidos con vandalismo
y reuniones concertadas para maquinar un golpe de estado, como también los
ataques a la economía y a todos los planes del gobierno, en conjunto, solo
vienen a sumarse a la embestida-venganza contra Faña como parte de un plan de
las mafias aludidas para desestabilizar al gobierno, con lo que estarían
creando las condiciones para el golpe de estado aludido. A la luz de
estos acontecimientos, queda en evidencia, que los ataques contra Faña son una
venganza personal del zar del ajo y sus asociados y del protagonista de las mal
llamadas visitas sorpresas. Aquel atrevimiento de Faña no se podía perdonar.
Desgraciadamente para ellos, Luis Abinader, el Ministerio Público Independiente
y nuestro pueblo, unidos como un solo hombre, estamos decididos a recuperar la
institucionalidad del país, sacando de raíz a las mafias, que hasta ahora
operan con toda maldad, controlando casi todos los estamentos del estado.
El que tenga oídos, que oiga…